¿Por qué unas personas consiguen sus sueños y otras no?
¿Cómo afectan las creencias de cada uno en ello?
Es increíble la importancia que tiene la programación neurolinguística en todo esto. Si yo pienso de verdad y me digo que puedo lograr algo, tendré una gran probabilidad de conseguirlo; por el contrario, si yo creo que es muy difícil, ya puedo prepararme para fracasar.Y es que las creencias limitantes o potenciadoras se convierten normalmente en profecías auto-cumplidas.
La lista de creencias limitantes es larga: todos alguna vez hemos entonado el… no valgo, no soy suficiente, todo me sale mal, tengo mala suerte, seguro que no lo logro, habrá alguien mejor que yo, no me lo merezco, no soy tan constante, es muy difícil, este trabajo es lo mejor que puedo conseguir, no se va a fijar en mi esa persona, no voy a encontrar nada mejor, nadie me quiere, etc. Miedo, miedo y más miedo dentro de nosotros.
En cambio, qué bonito es tener esas creencias potenciadoras que nos hacen volar. Esos pensamientos de… yo valgo mucho, soy una persona increíble, seguro que tengo éxito, voy a tener suerte porque todo me sale bien, tengo cualidades para lograrlo, me merezco ser feliz, soy muy trabajador y constante, seguro que se fija en mi, soy muy inteligente y tengo mucha capacidad para lograr lo que me proponga, la vida es perfecta y me va a ayudar, etc. Amor, amor y más amor dentro de uno mismo.
Y ahora es cuando podría surgir la pregunta… ¿Qué pasaría si nos programáramos todos los días con creencias potenciadoras? ¿Somos lo que pensamos de nosotros mismos? ¿Quién o qué experiencias nos hicieron tener esas creencias? ¿Seguro que son ciertas?
Sea lo que sea, depende de nosotros ser conscientes de que podemos despertar, podemos amarnos de verdad y empoderarnos. Podemos lograr nuestros sueños. Lo que está claro es que nuestra actitud y nuestras creencias multiplican nuestras capacidades y aptitudes.
Y tú, ¿te quieres o te invade el miedo?
Edu Muñoz (Coaching en Valencia)